Boca vs. Libertad (vuelta): Otro paso más en la batalla

FOTOS: FOTOBAIRES
Otro paso más, Boca sigue dando lucha en la Copa. Con esos guerreros que saben el camino. Esta vez no fue en Brasil, fue en Paraguay, en el Defensores del Chaco, en ese escenario donde había caído River en el 2006 por 3-1. El Xeneize arrancó decidido a ganarlo, necesitaba ganar para pasar, ya que el empate sin goles lo dejaba afuera. Al principio Palacio hizo una gran jugada sacándose a dos defensores de encima en una baldosa pero la tira afuera. Libertad se plantaba muy atrás, de contra. Boca, manejaba la pelota como de costumbre, abriendo la cancha con Clemente e Ibarra, Ledesma y Neri, y con el mister JR conduciendo el timón. Pero entrarle a la defensa guaraní era un jeroglífico. El equipo argentino contaba con todos sus soldados, la armada de la Ribera iba por otro milagro, de esos que enriquecen su historia.
Ya en el se
gundo tiempo, otra vez Palacio se pierde un gol increíble en el área chica, de media vuelta la había tirado afuera. Pero apareció el Mister: Juan Román Riquelme. El crack argentino agarró la pelota en mitad de cancha, se sacó a uno de encima, luego encaró por el borde del área rival, entre tres defensores amagó y sacó el latigazo. Golazo del 10 bostero. Delirio de las 10.000 almas xeneizes testigos de otra hazaña boquense, que merecían un Martín Fierro por la fe en que si se puede ganar. Por que Boca era mejor, jugaba mejor, y por que tiene esa chapa que solo se compara con la del Milan. Después, y luego de un corner, Palermo la baja para Palacio que esta vez sí, dijo la tercera es la vencida y liquidó el pleito: 2-0 y a otra cosa. Libertad desapareció. Ahora se viene Cúcuta, un rival raro, que hace acordar obligatoriamente a Once Caldas. Pero Boca… Boca es Boca.


Morel: cada día mejor, hay que nacionalizarlo. Nunca entrega una mal, tiene experiencia y calidad.
Cata Díaz: otro con perfil copero. Se lo necesita entero por que marca la diferencia. Anuló a López.
Ibarra: jugó, cubrió, colaboró y entregó todo. Otro soldado de primer nivel.
Banega: muy quieto. Le faltó imponer presencia. Se lo comieron entre Guiñazú y Cáceres.
Riquelme: la figura. En el primer tiempo organizó todo pero a Boca no se le daba. Luego tomó las riendas con una corajeada que valió doble. Es como el vino, cuanto más viejo mejor.
Palacio: apareció luego de intermitencias. Por fin demostró que se puede contar con él en las más difíciles.
Palermo: titán. Es como el sol, nadie lo ve pero siempre está. Dejó todo en la cancha, como siempre, y regaló una asistencia. Un ejemplo.

No hay comentarios.: